Cómo elegir tu crema hidratante

Ya estuvimos hablando un poco de cómo debería ser la rutina de skincare básica, y uno de los pasos fundamentales e importantísimos para la piel es la hidratación. Ahora tenemos otro problema: ¿cómo elegir la crema hidratante ideal para mí? Te cuento un poco qué cosas deberías tener en cuenta a continuación 😉

Conocer tu tipo de piel

Básico y fundamental: no son los mismos requerimientos de formulación los de una piel seca que grasa, e incluso muchas cremas hidratantes tienen también principios activos para tratar alguna condición de la piel.

Sobre los tipos de piel hablaremos otro día, pero no está demás aclarar que lo mejor es que un profesional (puede ser cosmetólogo, cosmetólogo médico o dermatólogo) haga una evaluación de tu piel y sus necesidades.

En reglas generales, las pieles mixtas y grasas se favorecen de fórmulas en base a agua y texturas gel y crema-gel. Otra cosa por la que podés guiarte y es importante es que diga “oil-free” o “no comedogénico”.

En cuanto a ingredientes, los alfahidroxiácidos son principios activos que podrían ser útil incluir en rutinas de pieles con tendencia acneica. Las pieles con mayor producción de sebo se ven favorecidas por el ácido hialurónico, la niacinamida…

Las texturas más pesadas y las cremas que tienen muchos aceites son ideales para pieles secas. Estas pueden beneficiarse de ingredientes como el ácido hialurónico, la urea, la lanolina, el escualano, las ceramidas…

En el caso de pieles sensibles, es especialmente importante evitar las fragancias y elegir ingredientes calmantes como el aloe, el ácido láctico, la centella asiática, el té verde, la niacinamida y la manzanilla.

Los antioxidantes como la vitamina C, algunos AHA y también los retinoides recetados por un profesional son ingredientes que pueden tener las cremas para aquellas personas que quieren prevenir el envejecimiento.

Tu bolsillo sabe

De nada sirve comprar una crema si luego no vamos a poder mantener ese gasto en el tiempo. Hay buenas cremas en todos los precios, así que la cuestión es elegir una que le quede bien a tu bolsillo y con la que sepas que vas a poder mantener la rutina.

¿Me la voy a poner?

Lógico y fundamental. Además de que para tener una rutina de skincare esta tiene que volverse una rutina (¡qué trabalenguas!) y para eso hay que tener fuerza de voluntad; hay otra cosa que ayuda a mantener esa rutina: que los productos te gusten. 

Así que la crema no solo debe tener los ingredientes adecuados para tu tipo de piel, adaptarse a tu bolsillo… sino que también precisa tener una textura, un aroma, una sensorialidad que te haga feliz. De otra forma, vas a terminar tirándola a la basura.

Algunas otras consideraciones

Otras cosas que deberías tener en cuenta a la hora de comprar una crema hidratante:

  • Si vas a comprar una crema con SPF para el día, deberás tener otra para la noche sin protección solar. Lo mismo sucede con algunas cremas con ciertos principios activos que tal vez solo te sirvan para usar por la noche.
  • Tené en cuenta que las necesidades de tu piel pueden cambiar a través de las estaciones, la humedad, e incluso lo que esté pasando tu piel en ese momento. Por ende, puede que precises cambiar de crema entre una estación y la otra.

Contame, ¿cuál es tu crema hidratante favorita? ¿Te costó mucho encontrarla?