Prontos, listos, ¡sale!

¿Estamos de acuerdo que con las rebajas o sale nuestro pulso se acelera y nuestra navegación online por las marcas aumenta? ¡Hiperventilamos solo de pensar en aquellas joyitas que vamos a comprar a un mega precio!


Esperamos este mes del año como ningún otro, depositamos en él todas nuestras expectativas de transformar nuestro guardarropa en outfits i n c r e i b l e s. Treinta, cuarenta, hasta cincuenta por ciento menos y podemos acceder a aquellas prendas que quizás habitualmente no compraríamos.


En este punto en particular me gustaría detenerme y reflexionar a propósito de cuáles prendas comprar en épocas de sale. No les voy a dar los típicos tips de comprar de forma inteligente en épocas de rebajas, tampoco les voy a sugerir comprar básicos, porque ante todo para mí las rebajas son una experiencia muy divertida.


Me gusta ir a revolver, probarme, comprar, no comprar. ¡La euforia de las rebajas es genial!
Claro está que lo que compramos en rebajas no son productos de primera necesidad, y cuando entendemos esto, la presión disminuye y empezamos a disfrutar todo el proceso de compra.


Proceso que comienza desde que planeamos ir de compras con amigas o solas, llegamos a la tienda y nos abrazan los percheros abarrotados de increíbles prendas solas esperando que alguien les dé vida, ¡sí, vida!

Acá el mundo se divide en dos: están las que recorren toda la tienda haciendo como un paneo general para después ver que llevan, o estamos las que a medida que recorremos la tienda vamos tomando las prendas que vamos a llevar; todas con un mismo objetivo: encontrar esa joyita.

En sale todas deberíamos poder identificar qué sí y qué no de forma rápida, pero como la experiencia me indica, a veces esto no sucede.

A continuación voy a contarte lo que a mí me resulta.

En la medida de lo posible, antes de salir de casa echá un vistazo rápido a tu guardarropa, refrescando qué prendas ya tenés, más que nada haciendo énfasis en los colores.

Existen prendas que deseamos tener. Aquellas que sacan un suspiro al verlas, que pensamos “qué bomba” y que claramente no incorporamos a nuestro guardarropa. Esto sucede por dos motivos, por su elevado costo o por su versatilidad, el primer motivo es el más limitante.
Entonces ¿qué mejor oportunidad para comprarla que a un precio increíble?


Mi visión en época de rebajas es que son oportunidades para hacerme de prendas protagonistas y de buena calidad a precios que se ajustan más a mi realidad. Hay quienes mantienen que en sale deberíamos comprar básicos, o sea aquellas prendas que sabemos que vamos a usar mucho, y en varios looks. En resumidas cuentas, ir a lo seguro. Pero a mí me gusta surfear las olas…

¿Acaso comprar un blazer fucsia no te asegura un outfit exitoso? Y combinado con verde Italia ni te digo. Arriesguen, combinen colores, texturas, vayan por más. Salgan de la zona de confort, prueben outfits distintos, denlo todo y más por ustedes mismas.

Sin perder de vista que las marcas quieren vendernos y nosotros sabemos lo que queremos comprarles, así la relación es ganar o ganar.
¡Buenas compras!


#LAMODAHABLA