El mundo del maquillaje nos vende todo el tiempo productos “larga duración” o “waterproof” prometiéndonos maravillas de ellos, pero… ¿Son realmente mágicos? ¿Cuál es el secreto atrás de estas fórmulas?
Productos waterproof
Seguro que conocés las máscaras de pestañas waterproof, pero básicamente cualquier producto de maquillaje puede ser “resistente al agua”: hay bases de maquillaje, sombras, labiales (mis favoritos son los Matte Ink de Maybelline). Muchas veces también se les llama productos “long lasting” o “larga duración”.
Sus fórmulas suelen tener componentes diferentes a los de fórmulas básicas para lograr su cometido: resistir al agua, a la humedad, al sudor, al paso de las horas… ¿Cómo lo hacen? Mediante ingredientes adhesivos o formadores de película.
Los formadores de película suelen ser de moléculas muy grandes, por lo que al extenderse no son absorbidos por la piel sino que quedan formando una capa que recubre la zona. Hay muchos ingredientes formadores de película y adhesivos, la mayoría son polímeros a base de silicona o acrilato. Suelen elegirse no solo por ser ingredientes a prueba de agua, sino también por sus fórmulas ligeras y transpirables que hacen que la experiencia sensorial también sea agradable.
En algunos casos también se usan otros ingredientes hidrosolubles que permiten dar una mayor resistencia al agua, pero claramente eso dependerá del producto.
La elegida: la máscara waterproof
Si hablamos de un producto waterproof por excelencia, esa es la máscara de pestañas. Dura todo el día sin correrse y ayuda a mantener el rizo característico que todas queremos durante más tiempo.
Mientras que las máscaras de pestañas clásicas tienen ceras, pigmentos y polímeros que están mezclados -pero no disueltos- en agua; las máscaras waterproof tienen estos mismos ingredientes pero mezclados en un disolvente no acuoso (los que mencioné más arriba, uno de los más conocidos es la dimeticona). La magia está en que estas máscaras no tienen entre sus ingredientes el agua, por lo cual, no se disuelven en ella. A este tipo de fórmulas se les llama hidrofóbicas.
¿Cómo sucede esto? Si analizamos los enlaces químicos de los ingredientes, vemos que las máscaras solubles en agua tienen ingredientes que favorecen los enlaces de hidrógeno. El agua (H2O) es una molécula polar que forma fácilmente estos enlaces de hidrógeno. De esta forma, el agua y algunos ingredientes de la máscara de pestañas “se atraen”, haciendo que el maquillaje se disuelva fácilmente en contacto, por ejemplo, con tus lágrimas.
Por su parte, los ingredientes de las máscaras waterproof, como ya hablamos, son no polares (enlaces de carbono-hidrógeno). Al entrar en contacto con el agua no forman enlaces y, por ende, no se disuelven.
Tips para desmaquillar productos infalibles
El maquillaje waterproof tiene un montón de ventajas y una gran desventaja: tenemos que retirarlo y no nos hace la tarea fácil. Hay algunos tips básicos que pueden servirte a la hora de hacer esta tarea más sencilla.
- Utilizar un limpiador bifásico. Este tipo de desmaquillantes tienen una parte acuosa y otra oleosa, que al mezclarse ayudan a retirar todo tipo de maquillaje. Acordate que un limpiador solamente acuoso no va a eliminar lo que sea resistente al agua, por lo que es necesario un producto bifaz.
- Apostar por un agua micelar. Las aguas micelares funcionan porque las micelas no son más que pequeñas moléculas con dos polos: uno soluble en agua y otro encargado de atrapar todos aquellos productos que son resistentes al agua.
- Animarse con los aceites. Los aceites o bálsamos desmaquillantes, tan comunes en la cosmética coreana, son una excelente opción para asegurarnos de que retiramos todo el maquillaje en profundidad. Y no, no te van a engrasar la piel, así que tranquila que son aptos para todas. Lo que sí es seguro es que luego vas a tener que usar un limpiador acuoso para completar la limpieza.
